El monasterio de Sant Pere de Galligants, sede del Museu d’Arqueologia de Catalunya en Girona, es uno de los ejemplos más notables del románico catalán. Fue fundado en el siglo X y actualmente podemos contemplar la iglesia y el claustro edificados en el siglo XII. En la iglesia, de planta basilical, pueden observarse varios elementos destacables, como el ábside central que preside, imponente, el espacio o sus espléndidos capiteles esculturados.
El claustro, de planta rectangular, destaca por los grupos de cinco columnas que en cada galería sustituyen a los tradicionales pilares centrales dotando al espacio de gran ligereza arquitectónica. A la vez, resaltan sus sesenta capiteles ricamente decorados con temáticas diversas que lo enriquecen visualmente.